CONSERVAR LA PAZ
Meditando el Evangelio desde el Corazón de la Madre
(Fuente: Espada de Dos Filos II, n. 73)
«María, por su parte, guardaba todas estas cosas y las meditaba en su corazón» (Lc 2, 19)
Evangelio según san Juan: 14, 1-6
Yo soy el camino, la verdad y la vida.
«Hijos míos: Jesús es el camino que los lleva a la tierra prometida, para darles vida. Él es la vida. Y siendo la vida, se ha entregado a la muerte para destruirla y rescatarlos de la oscuridad, para hacerlos luz con Él. Y el Padre lo ha resucitado de entre los muertos, para darles vida en Él. Él es la verdad que ha nacido en medio de un mundo de mentira, para darles libertad. Reconozcan la verdad que se ha revelado al mundo, y háganla suya, porque la verdad los hará libres.
El camino es el amor. El camino no solo se contempla, se anda. Y al andar se deja huella, para que los que caminan perdidos encuentren también el camino. Cristo es el camino. Él va al Padre, y no se olvidará de ustedes.
Permanezcan en el camino, vivan en la verdad y agradezcan la vida, uniéndose en una sola ofrenda al sacrificio del Señor, por el que el Hijo los lleva al Padre.
Participen en la Santa Misa con devoción, con toda su mente, con toda su alma y con todo su corazón, adorando a Jesús en la Eucaristía. Reciban su paz y díganle: gracias, perdón, y ayúdame más.
Si quieren oír de amor, escuchen a Jesús.
Si quieren conocer el amor, conozcan a Jesús.
Si quieren sentir amor, experimenten a Jesús.
Si quieren amar y ser amados, amen a Jesús, Él los ama.
Si quieren caminar seguros, caminen con Jesús, Él es el Camino.
Si quieren saber la verdad, sigan a Jesús, Él es la Verdad.
Si quieren tener vida, vivan en Jesús, Él es la Vida.
Si quieren tener paz, crean en Jesús.
Si quieren conservar la paz, abandónense en el plan de Dios, niéguese cada uno a sí mismo y cumplan su voluntad; tomen su cruz y sigan a Jesús».