CONOCER A CRISTO

Meditando el Evangelio desde el Corazón de la Madre

(Fuente: Espada de Dos Filos II, n. 35)

«María, por su parte, guardaba todas estas cosas y las meditaba en su corazón» (Lc 2, 19) 

 

Evangelio según san Juan: 8, 21-30

Cuando hayan levantado al Hijo del hombre, entonces sabrán que Yo Soy.

 

«Hijos míos: Jesús es la Palabra encarnada, fruto bendito de mi vientre. Él es el mismo ayer, hoy y siempre. Él es el pan de la vida, y quien merece todo honor y toda gloria.

Yo quiero llevarlos a ustedes a una adoración continua a la Sagrada Eucaristía, reunidos en una misma fe, en un solo pueblo santo de Dios, y crean que Él es el pan de vida, Cristo Eucaristía, el que está a la puerta y llama. Yo intercedo por ustedes, para que aumente su fe, y crean, y profesen que Él es el Alfa y la Omega, el Principio y el Fin.

No todos han tenido un verdadero encuentro con Cristo, y eso quiero promoverlo. Quiero que se den cuenta que es necesario que busquen a Cristo, que encuentren a Cristo, que amen a Cristo, y que vivan la vida de Cristo, para que otros también conozcan a Cristo y amen a Cristo. Pero, para llegar a eso, necesitan conversión.

Reciban con fe la Palabra de Dios, que es como espada de dos filos , y mi compañía, para que, en esa Palabra y con mi compañía, vuelvan a la oración, y busquen a Cristo, y encuentren a Cristo, y amen a Cristo. Él es el Alfa y la Omega, el Primero y el Último, el Principio y el Fin, hombre verdadero y Dios verdadero, Sacerdote eterno, Rey y Señor.

Hagan conciencia y corrijan su camino, no hagan nada por su cuenta. Lo que Él les enseñó, eso digan. Él está con ustedes y no los ha dejado solos. Hagan siempre lo que a Él le agrada, para que salgan de la oscuridad a la luz, para que conozcan la verdad que se revela a la humanidad todos los días, y puedan decirle al mundo: “ya no soy yo, sino es Cristo quien vive en mí”, para que el mundo crea en que Él es el Hijo único de Dios, para que tengan vida; porque todo el que crea en Él y en que Él es el que es, el que era, y el que vendrá, aunque muera, vivirá».