06/02/2025

MCM Mt 10, 7-15

LLEVAR EL AMOR AL MUNDO

Meditando el Evangelio desde el Corazón de la Madre 

(Fuente: Espada de Dos Filos IV, n. 16)

«María, por su parte, guardaba todas estas cosas y las meditaba en su corazón» (Lc 2, 19) 

 

Evangelio según san Mateo: 10, 7-15

Gratuitamente han recibido este poder; ejérzanlo, pues, gratuitamente.

 

«Hijos míos: el Señor los envía como testigos, sin alforja, sin sandalias, y sin seguridades del mundo, para que todas sus seguridades estén puestas en Él. Y les da su poder para que puedan trabajar haciendo en el mundo el bien gratuitamente, como gratuitamente se entrega Él. Pero no los envía solos. Ustedes me acompañan y yo les doy mi protección, porque yo piso la cabeza de la serpiente. 

Yo quiero que ustedes aprendan a amar a Dios, amando a Cristo, imitando a Cristo. Pero, para amarlo, hay que conocerlo, porque nadie ama lo que no conoce. El Espíritu Santo preparó en mí su morada, y la Palabra se hizo carne y puso su morada entre los hombres. Y creció en medio del mundo, con humildad, como cordero en medio de lobos. Y así fue enviado por el Padre a cumplir su misión.

Es imposible conocer a Dios y no amarlo, porque Dios es el amor, y el que conoce el amor, ama. Los que lo conocen y lo aman son sus testigos, y Él los envía de dos en dos, igual que a sus apóstoles, para dar testimonio de Él, para que crean en Él, porque el que vence al mundo es el que tiene fe y cree que Jesús es el Hijo de Dios. 

Permanezcan en la paz, en la alegría y en el amor de Cristo, bajo mi protección. Perseveren en la oración, que es la relación personal de cada uno con Dios. Es su esencia, lo más íntimo de su ser. Han sido creados a imagen y semejanza de Dios. Dios es amor. Por tanto, su esencia es el amor.

La oración no viene del pensamiento ni de la boca, sino del corazón. Es en comunión, en una entrega mutua de amor total, sin escrúpulos. De ustedes se requiere disposición y paciencia, lo demás lo hace Dios. Descubran y lleven al mundo su esencia».