ORACIONES Y REFLEXIONES PARA SACERDOTES

María Beatriz Arce de Blanco

Ayúdame, Señor, a no abandonarte.

Ayúdame, Señor, a no traicionarte.

Ayúdame, Señor, a no lastimarte.

Ayúdame, Señor, a no olvidarte.

Ayúdame, Señor, a no rendirme.

Ayúdame, Señor, a no desfallecer.

Ayúdame, Señor, a no resignarme.

Hazme fiel.

Hazme obediente.

Hazme dócil.

Hazme manso.

Hazme casto.

Hazme pobre de espíritu.

Hazme misericordioso.

Hazme humilde.

Hazme pequeño.

Hazme tuyo.

Dame fe.

Dame esperanza.

Dame caridad.

Dame pureza.

Dame castidad.

Dame perseverancia.

Dame tenacidad.

Dame bondad.

Dame sabiduría.

Dame entendimiento.

Dame consejo.

Dame fortaleza.

Dame ciencia.

Dame piedad.

Dame temor de Dios.

Dame un corazón dispuesto.

Dame oídos que oigan.

Dame ojos que vean.

Dame luz.

Dame alegría.

Dame fervor.

Dame inocencia.

Dame valor.

Dame paciencia.

Dame tu gracia.

Quítame la indiferencia.

Quítame la tibieza.

Quítame el miedo.

Quítame el velo.

Quítame el desgano.

Vacíame de mí y lléname de ti.

Enciéndeme con tu fuego.

Despójame de todo, pero dame amor.

Porque, si no tengo amor, nada tengo.

Porque el amor todo lo puede, todo lo excusa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta, todo lo alcanza.

Amén.

(Abluciones, n. 6)

¡Por el triunfo del Inmaculado Corazón de María!